No solo, resultaba difícil la adjudicación de la Copa Rudge, que tenia en cuenta la clasificación de la marca en los dos años anteriores, sino que el reglamento imponía también una serie de condiciones como una distancia mínima recorrida entre dos abastecimientos de gasolina, agua o aceite, o poner el coche en marcha solo con los medios disponibles a bordo. Incluso las reparaciones (hasta los sesenta) debían ser realizadas con las piezas de recambio embarcadas en el coche. Además de la clasificación general por distancia, existían otras dos clasificaciones, según el índice de prestación (relación entre la distancia recorrida y la cilindrada del coche) y, mas adelante, desde 1959, la del índice energético (relación entre la distancia y el consumo).
En los primeros años, la lucha se centro entre los Lorraine-Dietrich y los Bentley, pero, por las diferencia de cilindrada, fueron batallas tácticas mas que luchas directas, de forma que las victorias se fueron alternando. La primera figura de la carrera fue el británico Wolf Barnato, que gano tres ediciones consecuencias.
A principios de los años treinta las 24 Horas adquirieron su verdadera dimensión. En 1930, Mercedes irrumpió con sus SSK de 7,1 litros, pilotados por Caracciola y Warner, planteando cara a los Bentley, dominadores hasta entonces. El duelo hasta el abandono de Mercedes en plena noche.
La primera edición legendaria, sin embargo, fue la de 1933, cuando los tres Alfa Romeo oficiales, con sus motores 2.300 comprimidos, libraron una batalla sin cuartel. Nuvolari, el piloto mas famoso de la época, no se resignaba a ser un segundón, mando durante buena parte de la carrera, pero una larga reparación le hizo perder el liderato. Después efectúo una espléndida remontaba con su copiloto, Raymound Sommer, para irse alternando en primera posición con sus compañeros de equipo. La victoria de decidió en la ultima vuelta. Nuvolari adelanto a Chinetti, pero este recupero su primera posición, sin embargo, en los últimos compases, Nuvolari volvió a adelantarle para imponerse con diez segundos de ventaja.
Dos años después, un error de Alfa Romeo hizo que ganara un Lagonda. A dos horas del final, el Alfa supero a su rival, pero no lo adelanto en la clasificación, sino que simplemente se coloco en la misma vuelta. Sin embargo, los italianos se equivocaron en el calculo y no tuvieron tiempo para enmendar el error.
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Originally posted 2009-01-09 04:29:19.
